BOSTON — El Fenway Park se convirtió en una auténtica locura la noche del viernes, gracias a un poderoso batazo de Ceddanne Rafaela que impulsó a los Medias Rojas directo a la postemporada por primera vez desde 2021 con una victoria de 4-3 dejando en el terreno a los Tigres.
Para unos Medias Rojas que han tenido que escalar cuesta arriba durante gran parte de la temporada —ya sea por prolongadas lesiones a jugadores clave (Alex Bregman, Roman Anthony), un sorpresivo cambio de su estrella (Rafael Devers), o por rachas en las que el club se perdió sólo para reencontrarse después— conseguir el boleto con una remontada de 3-0 fue, sin duda, lo más apropiado.
Por supuesto, semejante drama llegó en una noche de viernes con el equipo vistiendo sus City Connect Fenway Greens. Boston terminó la temporada con marca de 6-5 de verde, y en esas seis victorias todas fueron dejando en el terreno, cinco de ellas en viernes.
Con Romy González en primera tras un sencillo con un out en la parte baja del noveno, Rafaela estrelló la pelota contra la pared del central para un triple decisivo ante Tommy Kahnle que desató la estampida de todo el equipo desde la cueva para celebrar.
“Ustedes han estado aquí todo el año, así que se los pongo así”, dijo Jarren Durán, quien había empatado el juego en el octavo con un sencillo productor. “Estamos en los greens. Juego cerrado, venimos de atrás y Rafaela al bate. Deberían haberlo escrito antes de que pasara. Raf ha hecho esto toda la temporada”.
Boston comenzará su andar en playoffs el martes como quinto o sexto sembrado de la Liga Americana en una Serie de Comodín al mejor de tres, toda en la carretera, contra un rival aún por definirse.
Antes de pensar en lo que viene, los Medias Rojas y sus aficionados saborearon el glorioso momento del viernes, que superó el previo mejor cierre del año, cuando Rafaela desapareció una pelota sobre el Monstruo Verde el 11 de julio frente a los Rays para dar un triunfo 5-4 con otro batazo decisivo.
Aunque es conocido por su defensa en el jardín central, Rafaela ha demostrado tener un instinto especial para los momentos dramáticos.
“No siento presión”, dijo Rafaela. “No hago eso. Quiero estar en esos momentos. Cuando llegan, quiero estar ahí. Quiero ser el hombre”.
Para González, quien comenzó la temporada como jugador de rol antes de convertirse en el segunda base titular, la carrera de 270 pies hasta el plato fue inolvidable.
“Fue increíble. Alcancé a ver a los muchachos saliendo del dugout corriendo hacia el campo. La multitud estaba enloquecida. Una sensación indescriptible”, contó González. “No creo haber corrido más fuerte en mi vida. Sé que es el Juego 160 y el cuerpo duele, pero en ese instante estaba entumecido”.
Fue quizás el final más emocionante de una clasificación de Boston a la postemporada desde que Tom Brunansky se lanzó de cabeza en la esquina del jardín derecho en Fenway para robarle extrabases a Ozzie Guillén el 3 de octubre de 1990.
Aunque Rafaela fue la figura, fue un esfuerzo colectivo y una dirección agresiva de Alex Cora lo que mantuvo el partido al alcance. Tras el déficit temprano, el piloto no dejó nada al azar y trajo a Justin Slaten en relevo del tambaleante Kyle Harrison, que había permitido tres carreras en el cuarto.
Uno tras otro, los relevistas respondieron: seis entradas combinadas de tres hits, cero carreras, un boleto y seis ponches. Garrett Whitlock ponchó a los tres en el octavo y Aroldis Chapman volvió a apagar el fuego en el noveno, dejando corredor en tercera tras un doble de Justyn-Henry Malloy y dominando con un slider devastador que hizo abanicar a Spencer Torkelson.
“Los muchachos siguieron peleando, tomando buenos turnos”, dijo Cora. “El bullpen siguió colgando ceros, y el chico [Rafaela], tiene algo especial. En su turno anterior ya había pegado una contra la pared. Sentimos que era un gran duelo para él contra Kahnle y la destruyó. Fue un esfuerzo total del equipo. Fue divertido de ver”.
Y por primera vez en cuatro años, habrá más béisbol de los Medias Rojas después de que termine la temporada regular el domingo.
“Es béisbol de playoffs”, dijo Durán. “Cualquier cosa puede pasar. Es divertido ser parte de esto ahora. Y ojalá seamos ese equipo loco que llegue hasta el final. Sería increíble”.
Fuente: MLB